Un error frecuente es considerar que un proyecto que nos ha funcionado en la solución de una problemática específica puede replicarse en otro lugar con un problema similar. En ocasiones puede ser así, pero pensar que con cambiar cuatro cosas va a funcionar en cualquier contexto, es cuanto menos una presunción muy optimista. Podría citar algunos ejemplos, pero en esta ocasión solo señalar que es una dinámica frecuente en algunas organizaciones que operan en amplios contextos territoriales.
Una de nuestras principales responsabilidades como profesionales de la educación social, es la realización de un adecuado análisis previo del contexto de intervención. Somos conscientes que la eficacia y efectividad de nuestras acciones dependerán en gran medida de, un previo correcto y exhaustivo proceso investigador.
Este proceso inicial se denomina análisis de necesidades:
“El estudio profundo de la realidad de un contexto de intervención para reconocer, diagnosticar y tomar decisiones”. Atanasio, M. P. P. C. (1991).
El correcto análisis de necesidades permite evidenciar carencias -en nuestro caso, de carácter socioeducativo-, que requieren soluciones específicas.
Existen diferentes procedimientos para descubrirlas, los pasos comunes son:
- Identificación del problema y sus causas.
- Establecer un punto de partida y su imaginario final deseado.
- Identificación de las personas afectadas.
- Propuestas de mejora.
- Propuesta de intervención para la obtención de las mejoras.
- Resultados esperados que pueden ser alcanzados.
Especialmente valioso para la intervención en educación social es el modelo A.N.I.S.E. (Análisis de Necesidades de Intervención Socioeducativa). Este proceso posibilita la detección de necesidades; reactivas, normativas, percibidas, expresadas, relativas, individuales, proactivas. En esta fase es especialmente útil despejar interrogantes que se correlacionan con nuestras posibilidades de respuesta.
Cuestiones a despejar respecto a la problemática:
- ¿Se puede resolver con una acción socioeducativa?
- ¿Qué tipo de intervenciones son necesarias?
- ¿Qué instrumentos utilizamos?
- ¿Qué estrategias?
Respecto a los métodos:
Diseño del procedimiento para obtener información relevante; entrevistas, observaciones, encuestas.
Respecto a las técnicas:
Qué instrumentos que utilizaremos; DELPHI, Estudio de casos, Grupo de discusión, etc.
Con el análisis de necesidades, nuestra propuesta debe presentar una estructura sólida que integre como mínimo, los siguientes elementos:
- Alcance
- Objetivos generales y específicos.
- Temporalidad
- Actores
- Recursos
- Proceso evaluativo que permita la rendición de cuentas (eficiencia, eficacia y efectividad).
En definitiva, cuando se solicita nuestra colaboración, previamente realizamos un previo análisis esquemático del problema. Básicamente:
Si decimos intervenir, implementamos el proceso completo.
BIBLIGRAFIA:
Alonso, R. R. (1999). Elaboración y desarrollo de proyectos socioeducativos. Padres y Maestros/Journal of Parents and Teachers, (242), 19-22.
Atanasio, M. P. P. C. (1991). Cómo detectar las necesidades de intervención socioeducativa (Vol. 21). Narcea Ediciones.
Orcasitas García, J. R. (1997). La detección de necesidades y la intervención socioeducativa. Educar, (21), 067-84.
Gracias a ti. Feliz fin de semana.
Muchas gracias por tu aportación. Feliz semana.